4to Congreso Misionero Nacional
Lema: “Argentina misionera, comparte tu fe”
Fecha: del 17 al 19 de agosto 2013
Lugar: Diócesis de Catamarca; Provincia de Catamarca
Resumen de lo vivido en estos días del Congreso:
Cerca de 850 congresistas, nos encontramos en la diócesis de Catamarca, para participar del CoMiNa4, 4to Congreso Misionero Nacional, con el objetivo de seguir trabajando en la Misión Continental, propuesta por nuestros obispos, con la intención de seguir animando el espíritu misionero en cada Iglesia particular de nuestra Argentina.
Otro objetivo del CoMiNa4 era prepararnos para participar del próximo Congreso Americano Misionero CAM4 y del Noveno Congreso Misionero Latinoamericano, Comla9, a realizarse en Maracaibo – Venezuela 2013.
El sábado 17 de agosto, al término de la recepción y acreditación de los congresistas, participamos del acto de apertura y la bienvenida, en la cual fuimos presentados las regiones y diócesis participantes.
En este primer momento nos dio la bienvenida Mons. Luis Urbanc, obispo diocesano de Catamarca y Mons. Vicente Bokalic, Presidente de la Comisión Episcopal de Misiones, de la Conferencia Episcopal Argentina.
Al término de las palabras de bienvenida, compartimos en los congresos misioneros que precedieron a este, recordando las sedes, los lemas, y sus conclusiones. Las cuales nos fueron introduciendo en el sentido que tiene un congreso, el evaluar, dialogar y buscar propuestas de acción.
Cerca de las 11:00hs de la mañana, dio comienzo a la primera ponencia, a cargo del Obispo de la diócesis de Gualeguaychú, Mons. Jorge Lozano, presidente de la Comisión de Pastoral Social de la Conferencia Episcopal Argentina y participante del Sínodo de Obispos sobre la Nueva Evangelización.
El tema que compartió fue: “Iglesia en estado de misión – Nueva Evangelización”.
En primer lugar, nos propuso como “contexto el Año de la Fe”, recordándonos que no hay hombre, que como la mujer de Samaria, quien se acercó al pozo para llenar su cántaro vacío de agua, también hoy hay hombres que buscan zacear ese mismo deseo de plenitud, nuestro desafío es ofrecer lo que aquella mujer hayo en su “encuentro con Cristo Jesús”, la fuente verdadera, fuente capaz de saciar lo más profundo de sus deseos.
En nuestro mundo contemporáneo, sigue existiendo ese desierto, el cual es propicio para descubrir el valor de aquello que es esencial para vivir.
En segundo lugar, nos propuso reflexionar sobre “que es la nueva evangelización”, la cual consiste en proponer al hombre de hoy el camino que lo conduzca a Cristo Jesús, que lo conduzca al “encuentro con él”.
La “nueva evangelización se dirige especialmente a aquellos que se han alejado de la Iglesia”
Para ello, en tercer lugar, nos llamo a la “conversión pastoral”. Concretamente buscar y animarnos a pasar de una pastoral de mera conservación a una pastoral decididamente misionera.
Para este paso será necesario impregnar toda estructura eclesial, todo plan pastoral diocesano, parroquial, comunidades religiosas, movimientos y de cualquier institución de la Iglesia, del espíritu misionero, a través del cual el hombre de hoy encuentre en la Iglesia su verdadera identidad, Madre y Maestra en la fe, Sacramento de Amor de Dios, es decir una madre que sale a su encuentro, una casa acogedora, una escuela permanente de comunión misionera. Y nos recordó las palabras de nuestro Papa Francisco, “no podemos conformarnos con ocuparnos de una sola oveja cuando las noventa y nueve, se han alejado”.
Como referencia para la conversión pastoral, nos propuso en cuarto lugar, descubrir que la nueva evangelización, promoción humana, tiene como opción preferencial por los pobres. Ya que el símbolo de autenticidad de la nueva evangelización tiene el rostro del pobre. Salir al encuentro del que está al borde del camino, el pobre, no es sólo un ejercicio de solidaridad, sino que hará creíble el mensaje del evangelio que anunciamos.
En quinto lugar nos habló que la nueva evangelización tiene como lugar concreto de realización la Iglesia particular y la parroquia.
La Iglesia particular es el sujeto de la nueva evangelización, que tiene como cabeza al obispo, que es ayudado por sacerdotes, diáconos, consagrados y laicos.
Ser sujeto de la nueva evangelización, significa que cada Iglesia particular, cada diócesis, es la comunidad primaria de la misión de la Iglesia. En la cual se ha de animar y dirigir una renovada pastoral, capaz de integrar la variedad de los carismas, ministerios, los estados de vida y recursos, impregnados del espíritu misionero, a través de un “proyecto orgánico” capaz de generar un lugar de encuentro que ofrezca a todos la plenitud de la vida cristiana y en especial para aquellos que se sienten lejos de la atención de la Iglesia.
Y cuando hizo referencia al rol de la parroquia en la nueva evangelización, nos recordó que cada uno sus miembros, hemos de convertirnos en agentes de la nueva evangelización, dando testimonio coherente, idóneo, creíble, a través de nuestras palabras y vida. Y saber que tenemos el desafío de unir a lo tradicional cura pastoral, actividades propias de una parroquia, las nuevas formas de misión que requiere la nueva evangelización, las cuales tienen que alcanzar las variadas formas de piedad popular.
Al término de esta primera ponencia, al igual que las dos siguientes, fuimos divididos por grupos para participar en los foros, y así reflexionar y trabajar en las conclusiones que al final del congreso se dieron a conocer.
Llegando al final del primer día, nos dirigimos a las parroquias que nos recibieron por regiones y compartir la Misa.
En el segundo día del congreso, domingo 18, nuevamente en el predio de ferial de Catamarca, luego de la oración de la mañana y de la Adoración Eucarística, compartimos la segunda ponencia, a cargo del Padre Oscar Alberto Martínez, Director de la Comisión Teológica Pastoral del CAM4, de Venezuela.
El tema: “Pluriculturalidad, interculturalidad y secularismo”.
Se nos invitó a pensar en lo importante, para el misionero de nuestro tiempo, de conocer las características que describen las diferentes realidades de nuestro pueblo, las cuales nos darán las claves adecuadas para saber ser eficaces en el anuncio del kerigma.
Este mundo es post moderno, pluricultural y secularizado.
Algunas de las características que hemos de tener presente son:
En la post modernidad se ha afianzado, a través del relativismo, la idea de no haber verdades eternas y permanentes. Por lo cual, el diálogo con el hombre de hoy, no encuentra muchas veces una capacidad de apertura y humildad.
Por otra parte, en materia cultural, diferentes acontecimientos, en especial a través de los medios de comunicación, han generado que diferentes culturas, desconocidas entre sí, hoy interactúen. Generando nuevas maneras de pensar, actuar y vivir. Las cuales ofrecen al hombre de hoy diferentes respuestas a sus búsquedas, generando desafíos nuevos para el anuncio del kerigma.
Se ha generado también un espacio propicio para que el secularismo, la negación e indiferencia ante lo trascendente se afiance. Otro desafió más que hemos de tener presente al momento de anunciar el kerigma.
Nuevamente al término de la ponencia, nos reunimos por grupos en los diferentes foros.
Al término del almuerzo, y de un tiempo de animación, se dio comienzo a la tercera ponencia, a cargo del padre Dante de Sanzzi, Director Nacional de OMP.
Tema: “Misión Ad – Gentes”.
Para recuperar la conciencia misionera en nuestras comunidades, es descubrir que todo cristiano, es una persona sin fronteras, e ir entendiendo que la Misión Ad – Gentes, no es solo ir más allá de las fronteras territoriales, sino que el primer paso es ir “más allá de mí mismo”.
Al termino de los trabajos por grupos en los foros, y de compartir la merienda, dimos inicio a la procesión hacia a la Catedral. Al llegar participamos de la celebración de la Eucaristía. Al término de la misma, tuvimos el acto cultural, en el cual cada región se presento, a través de bailes y representaciones.
El lunes 19, congregados nuevamente en el Predio Ferial de Catamarca, compartimos la Adoración al Santísimo como oración de la mañana. Luego se dieron a conocer las conclusiones del CoMiNa4.
Tuvimos la presentación del CAM4 y del COMGLA9.
Y cerca del mediodía celebramos la Eucaristía y recibimos el envió misionero.
Quienes hemos participado del congreso, representando a nuestra diócesis de Zarate – Campana, Cecilia Sarna, Lucia Castelli, Jony Sfardini, la familia Jeanot, Martin, Agustina y sus hijos Juan Bautista, Máximo y Faustina, y el padre Gabriel.
Conclusiones del CoMiNa IV
Las Obras Misionales Pontificias en la Argentina dieron a conocer las conclusiones y propuestas a las que tenderán durante los próximos años, determinadas en base a los paneles desarrollados y la escucha de los congresistas reunidos.
La Iglesia misionera en la Argentina sostuvo que la misión permanente, propuesta en el Documento de Aparecida , aún se encuentran “en gestación”, demasiado teórico y “con dificultades”, como la “falta de fervor, de acompañamiento pastoral, de propuestas metodológicas y de unidad”.
También rescataron que la diversidad cultural que se vive en la Argentina, y en medio del contexto secularizado, identificaron “aspectos positivos” desde los cuales fortalecer el anuncio del Evangelio: la búsqueda de lo trascendental, la religiosidad popular, la existencia de valores humanos y fraternos y una mayor facilidad de relacionarse mutuamente.
También enfocaron la vida de fe desde el encuentro personal con Cristo, su Palabra, la oración y la vida cotidiana, en los testimonios y en la alegría del servicio. Reconocieron que la misión Ad Gentes está al alcance de todos. “Ello requiere un discernimiento personal y comunitario porque no todos somos llamados ni nos sentimos formados para una misión ad extra“.
Desde este panorama, propusieron “fortalecer la misión paradigmática trabajando con todas los sectores pastorales”, “cultivar vínculos para una mayor humanización de las comunidades”, “crecer en la conversión personal y pastoral”, “dar lugar a los jóvenes para que vigoricen la pastoral y aporten su creatividad”, “reconocer el lugar de los laicos, escucharlos y animarlos para la misión”, y “formar y fortalecer los equipos diocesanos de OMP para que sean un ámbito de referencia, información y apoyo”.
Entre los objetivos, también marcaron el deseo de activar como ámbitos prioritarios para comunicar la Palabra la familia, la escuela, las facultades, las plazas, las redes sociales, las cárceles, el deporte, la cultura, la religiosidad popular, el mundo del dolor y el sufrimiento y otros grupos parroquiales.
También propusieron promover los diferentes carismas y ministerios laicales en la Iglesia, fomentar las pequeñas comunidades para descentralizar las parroquias, crecer en la capacidad de escucha, encuentro y creatividad, implementar la formación misionera en seminarios y casas de formación religiosa, programar talleres de iniciación y formación ad gentes por regiones, incentivar la cooperación misionera material y espiritual como tarea de toda la Iglesia y crear órganos de promoción, apoyo, acompañamiento y reinserción de misioneros ad gentes.+