Diócesis de Zárate – Campana

PAPA FRANCISCO: MATAR EN NOMBRE DE DIOS ES SATÁNICO, SERÍA BUENO QUE TODAS LAS CONFESIONES RELIGIOSAS LO DIJERAN

Queridos amigos, les ofrecemos la homilía de hoy del Papa en su Misa por el P. Jacques Hamel, degollado por dos terroristas en julio mientras celebraba la Misa en su parroquia de Saint-Etienne-du-Rouvray (Francia):

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Fuente: News.va 15 de septiembre

«En la Cruz de Jesucristo –hoy la Iglesia celebra la fiesta de la Cruz de Jesucristo- comprendemos plenamente el misterio de Cristo, este misterio de anonadamiento, de hacerse cercano a nosotros.
Él, “siendo de condición divina –dice san Pablo- no consideró esta igualdad con Dios omo algo que debía guardar celosamente: al contrario, se anonadó a sí mismo, tomando la condición de servidor y haciéndose semejante a los hombres; presentándose con aspecto humano, se humilló hasta aceptar por obediencia la muerte, y muerte de cruz” (Fil 2,6-8).
Este es el misterio de Cristo. Es un misterio que se hace martirio por la salvación de los hombres. Jesucristo, el primer Mártir, el primero que da la vida por nosotros. Y de este misterio de Cristo comienza toda la historia del martirio cristiano, desde los primeros siglos hasta hoy.
Los primeros cristianos confesaron a Jesucristo pagando con su propia vida. A los primeros cristianos se les proponía la apostasía, esto es: ‘Digan que nuestro dios es el verdadero, no el suyo. Hagan un sacrificio a nuestro dios o a nuestros dioses’. Y cuando se negaban, cuando rechazaban la apostasía, los mataban.
Esta historia se repite hasta hoy; y hoy en la Iglesia hay más mártires cristianos que en los primeros tiempos. Hoy hay cristianos asesinados, torturados, encarcelados, degollados, porque no reniegan a Jesús. En esta historia, llegamos al P. Jacques: él forma parte de esta cadena de mártires.
Los cristianos que hoy sufren –sea en la cárcel, sea con la muerte o con torturas- por no renegar a Jesucristo, muestran precisamente la crueldad de esta persecución. Y esta crueldad que pide la apostasía es –digamos la palabra- satánica. Y qué bueno sería que todas las confesiones religiosas dijeran: “Matar en nombre de Dios es satánico”.
Padre Jacques Hamel fue degollado precisamente mientras celebraba el sacrificio de la Cruz de Cristo. Hombre bueno, apacible, fraterno, que siempre trataba de fomentar la paz, fue asesinado como si fuera un criminal. Este es el hilo satánico de la persecución.
Pero en este hombre que aceptó su martirio allí en el altar, con el martirio de Cristo, hay una cosa que me hace pensar mucho: en medio de aquel momento difícil que vivía, en medio de esta tragedia que veía venir, él, un hombre apacible, bueno, un hombre que promovía la hermandad, no perdió la lucidez para acusar y decir claramente el nombre del asesino, y dijo claramente: “¡Vete, Satanás!”.
Dio la vida por no renegar a Jesús. Dio la vida en el mismo sacrificio de Jesús en el altar, y desde allí acusó al autor de la persecución: “¡Vete, Satanás!”.
Que este ejemplo de valentía, del martirio de la propia vida, de darse a sí mismo para ayudar a los demás, de crear fraternidad entre los hombres, nos ayude a todos nosotros a ir adelante sin miedo. Que él, desde el Cielo –porque hemos de rogarle, es un mártir, y los mártires son beatos, debemos rogarle- nos dé la mansedumbre, la hermandad, la paz, y también el valor para decir la verdad: matar en nombre de Dios es satánico».

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